Mientras el nuevo curso escolar 2024-2025 arranca este lunes en las escuelas de la Cisjordania ocupada, en la Franja de Gaza por segundo año consecutivo más de 630,000 estudiantes no regresarán a las aulas de institutos ni de universidades por la guerra.
En los territorios ocupados cisjordanos, incluida Jerusalén Este, se calcula que más de 806,360 estudiantes se han matriculado en más de 2,000 escuelas públicas y privadas gestionadas por la agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
Los bombardeos israelíes, con el inicio de la guerra el pasado 7 de octubre, obligó a muchos centros escolares a cesar su actividad y a convertirse en refugios para los miles de gazatíes que se han quedado sin casas.
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El Ministerio de Educación del territorio suspendió el curso 2023-2024 el pasado mes de noviembre.
Con la guerra todavía activa y con una Franja devastada el curso escolar de este año también queda suspendido; además de que los problemas de acceso a la electricidad y a internet son constantes.
La noche del domingo las comunicaciones móviles e internet fueron cortadas en el centro y sur de la Franja a causa de la destrucción de las torres de transmisión por los ataques israelíes, según informa la agencia oficial de noticias palestina, Wafa.
Por otra parte, el Gobierno gazatí denuncia que al menos 122 escuelas y universidades quedaron completamente destruidas, y que otras 334 han resultado dañadas por los incesantes ataques israelíes.
Además, la mayoría de las escuelas gestionadas por la UNRWA (unas 200) en la Franja de Gaza se convirtieron en refugios para los desplazados, y el 70% de ellas fueron bombardeadas, denuncia la agencia.
Las autoridades palestinas han contabilizado al menos la muerte de más de un centenar de científicos, profesores universitarios e investigadores por los bombardeos israelíes.
Desde el inicio de la guerra en Gaza que ya ha cumplido 11 meses, más de 25,000 niños han resultado muertos o heridos, según el Gobierno del enclave.