HOUSTON - Un jurado deliberó por más de 10 horas antes de condenar a Gerald Goines, exoficial del Departamento de Policía de Houston, por su participación en la redada de Harding Street en 2019 que resultó en la muerte de Dennis Tuttle, Rhogena Nicholas y su perro.
Goines, quien fue encontrado culpable de dos cargos de homicidio grave, recibió su sentencia el martes, poco después del mediodía, tras el sonar de dos campanas que alertaron al juez sobre una posible decisión. El caso ha sacado a la luz graves problemas dentro de las fuerzas de seguridad, especialmente en torno al uso de órdenes judiciales sin aviso (no-knock warrants).
La fiscalía, liderada por Tanisha Manning y Keaton Forcht, buscaba una sentencia de cadena perpetua, destacando las devastadoras consecuencias de las acciones de Goines. Manning calificó el caso como el peor abuso de poder en la historia del condado de Harris, retratando a Goines como un oficial corrupto que traicionó la confianza pública.
Por su parte, el equipo de defensa, encabezado por Nicole Deborde y George Secrest, instó al jurado a considerar la carrera de Goines en la aplicación de la ley, señalando los muchos años que dedicó a combatir el crimen relacionado con las drogas. También destacaron los problemas de salud del exoficial y el daño a su reputación, sugiriendo una sentencia menor de cinco años para el hombre de 61 años.
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