Los hermanitos del menor vivieron un año solos con el cadáver hasta que pudieron llamar a la policía.
HOUSTON - Recibió sentencia de vida en prisión el hombre que mató brutalmente a su hijastro de 8 años en presencia de los hermanos de éste.
Brian Coulter de 43 años golpeó hasta la muerte al niño y luego dejó a los otros tres hermanos de 7, 10 y 15 a vivir con el cadáver.
Fue hasta octubre del 2021, que el mayor de ellos pudo hacer la denuncia a la policía, que al llegar encontró a los niños en condiciones paupérrimas y el cuerpo en estado de descomposición.
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Fueron los mismos menores quienes relataron cómo el hombre golpeó al menor y siguió pateándolo aun cuando ya estaba inconsciente.
“La juez reprochó a Coulter por el horrendo crimen y le dijo que espera que el recuerdo de los menores lo persiga para siempre”.
El crimen ocurrió en el 3535 de Green Crest al oeste de Houston.
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La madre de los menores, Gloria Y. Williams, está acusada de dañar a un niño por omisión y alterar pruebas, es decir, el cuerpo de Kendrick.
Coulter, luciendo su tatuaje de 'Guerrero' en la parte delantera de su cuello, permaneció sentado con su traje amarillo de prisión, sin mostrar ninguna emoción.
Fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
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