Es muy poco lo que se necesita para que un día cualquiera se convierta en uno extraordinario si uno sabe a dónde mirar y puede reconocer que en lo simple se esconde una gran belleza, principalmente cuando hablamos de la naturaleza.
Precisamente esto le ocurrió a Tom Howe, quien es pastor en la Iglesia de Saint Andrew, en Baton Rouge, pero se encontraba hace unos días en la Isla del Padre cuando avistó a un tejón, animal que se caracteriza por ser solitario y elude la presencia de los humanos.
Antes de este encuentro, Howe llevaba varias semanas luchando contra el COVID-19, enfermedad que había dejado muy fatigado, como compartió él mismo en su página de Facebook. Pero el pasado 15 de agosto su día daría un vuelco que propició un estupendo encuentro con la naturaleza en la Isla del Padre Sur.
"Hoy por fin me he sentido con energía para ir a la playa a pescar un poco. Me detuve en el marcador de treinta millas, pero estaba lleno de hierba, así que fui a moverme. La batería de mi coche estaba muerta. No es un lugar con mucho tráfico, muy aislado", explicó el pastor.
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Sin embargo, dos jóvenes guardabosques se detuvieron pero no pudieron arrancar el vehículo. Posteriormente, encontró lo que estaba agotando la batería y pudo encender el vehículo, dijo. "Los tiburones pueden esperar otro día", añadió.
"En mi camino de regreso me encuentro con este joven tejón buscando cangrejos tanto en la arena como en el agua. Hace poco que me enteré de que había tejones en la isla, casi nadie aquí sabe que los tenemos. Los tejones suelen evitar a la gente y estar expuestos", explica el hombre cuyo encuentro ya ha sido reseñado en varias publicaciones.
A simple vista se nota que Howe es amante de la naturaleza, ya que en su página de Facebook tiene imágenes de otros animales y de la naturaleza.
En cuanto al tejón, Howe advirtió que tienen mal genio y no deberías intentar acariciarlos. Incluso, durante el encuentro que tuvo, se le acercó un agente de la Patrulla Fronteriza y estuvo hablando un rato sobre este suceso. "Llegamos a la conclusión de que el calor extremo y la sequía han provocado un cambio de comportamiento", dijo.
"Me quedé un rato observando, ya que se trata de un acontecimiento único en la vida. Hace poco vi uno en Yellowstone, que fue el primero que vi en libertad", añadió¨el hombre, quien publicó varias imágenes del encuentro en su página de Facebook.