Un hombre de origen cubano y que radicaba en México está siendo juzgado en el sur de Florida por pertenecer a una red de contrabando de personalidades del deporte que exactamente se encargaba de mover peloteros de la Isla y meterlos a las grandes ligas de EEUU a cambio de una gran porción de dinero.
Tomás Valle Valdivia, de 44 años, enfrenta varios cargos por contrabando de personas. Un juez de Miami le acusa de ser parte de una empresa criminal que ganaba dinero explotando a deportistas cubanos mientras le pedía una jugosa suma de sus contratos luego de ponerlos a vivir en EEUU.
En 2017 otro agente deportivo habría sido sentenciado a 3 años de prisión por ayudar a meter ilegalmente a jugadores famosos de Cuba como José Dariel Abreu, quien actualmente juega con los Medias Blancas de Chicago-, y Adeiny Hechavarría, quien está con los Atlanta Braves.
De acuerdo con un reportaje de ESPN, Valdivia, quien fue deportado en junio desde México, era el líder del grupo que originalmente sacó de Cuba a Yasiel Puig en 2012.
El hecho cobró renombre internacional luego de que el bote que llevaba al jugador a Cancún se quedó sin combustible a medio camino y otro grupo de traficantes se llevó al cubano en medio de la noche.
Supuestamente, aunque Valdivia trató de conseguir un poco más del precio acordado con el pelotero subiendo de $250.000 a $400.000, nada se pudo cobrar, pues unas semanas después Puig había firmado un contrato de 42 millones con los Dodgers de Los Ángeles.
Tomás Valle es acusado además de introducir ilegalmente a otros cubanos por el precio percápita de $10 mil dólares por cabeza.
Supuestamente George Ferrer Sánchez trabajaba asociado a Tomás Valle. Aparentemente, a Ferrer se le sorprendió dándole instrucciones a un jugador para depositar $400.000 en una cuenta bancaria de una compañía de administración deportiva.
Además habría escrito varios cheques a terceras personas como pago por el contrabando. Ferrer se declaró culpable por cargos de lavado de dinero el pasado 15 de agosto.