Entre lágrimas y recuerdos, miles de familias navegan por un Día de Acción de Gracias teñido de emociones encontradas y nostalgias profundas.
HOUSTON - En días que tradicionalmente se celebra con júbilo y gratitud, miles de estadounidenses enfrentan una realidad emocional más compleja durante el Día de Acción de Gracias, Navidad y despedida de año.
Expertos en salud mental revelan que el 60% de los habitantes del país experimentarán un amplio espectro de sentimientos que van desde la melancolía hasta la profunda tristeza.
La narrativa de este año muestra un panorama más allá de la tradicional imagen de reunión familiar. Para muchos inmigrantes, residentes de la tercera edad y familias separadas, la festividad se convierte en un recordatorio de ausencias y desafíos.
Gilberto Reyes, de 85 años, residente de Houston, ejemplifica esta realidad. Con la voz entrecortada, comparte su mañana de Acción de Gracias: "Me sentía como triste, porque en estos tiempos uno como que se agüita, pero ya me pasó, pensando en la familia que está lejos y mis hijos".
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La terapeuta Paola González Fusilier explica que los días festivos tienen un significado profundo culturalmente. "Si nuestra familia está en otro país y estamos solos, y no tenemos con quién convivir, las personas empiezan a sentirse de esa manera y vemos a más personas durante este tiempo con ese tipo de depresión", señala.
Dámaris González, activista del Texas Organizing Project, añade otra capa de complejidad al destacar las situaciones de familias separadas por procesos migratorios: "Es un día donde las familias deben estar juntas, y hay muchas veces que eso no es así, ya sea porque hay personas en situaciones de deportación o que han venido a Estados Unidos dejando a sus familias atrás".
Los expertos recomiendan estrategias para manejar estas emociones: salir a caminar, despejar la mente, escribir cartas para expresar sentimientos, e incluso buscar ayuda profesional si es necesario.
A pesar de las adversidades, el mensaje central es de esperanza: encontrar momentos de conexión, gratitud y autocuidado, incluso en medio de circunstancias difíciles.
En fin, se hacen llamado a la resiliencia: independientemente de las circunstancias que se enfrenten, es crucial intentar disfrutar el día, rodearse de personas cercanas y, sobre todo, ser comprensivos con uno mismo.
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