ORLANDO, Florida - Los padres del infante que murió en un centro vacacional de Walt Disney World cuando un caimán lo arrastró al agua no planean demandar al parque temático de Florida.
Matt y Melissa Graves, de Omaha, Nebraska, informaron el miércoles en un comunicado que quieren enfocarse en la futura salud de su familia. Sara Brady, portavoz de la familia, dijo que no podía decir si los Graves habían llegado a un acuerdo financiero con Disney World.
"La familia realmente está enfocada en seguir adelante y buscar sanación", dijo Brady.
En el comunicado, los padres dijeron estar "quebrantados" por la muerte de su hijo de dos años, Lane.
"Pasaremos toda la vida tratando de comprender por qué le pasó esto a nuestro dulce bebé, Lane", dijeron. "Conforme pasan los días, el dolor aumenta pero realmente apreciamos el torrente de aprecio y buenos sentimientos que hemos recibido de todas partes del mundo", indicaron.
El presidente de Disney World, George Kalogridis, dijo en un comunicado que la empresa sigue apoyando a la familia. La portavoz Jacquee Wahler no dio más detalles.
Las autoridades dicen que el caimán arrastró a Lane Graves al agua el 14 de junio. Matt Graves dijo que otro caimán lo atacó cuando trató de salvar a su hijo.
El cadáver del infante fue recuperado al día siguiente y la autopsia indicó que murió ahogado y por heridas.
Después de la muerte de Lane, Disney World limitó la distancia a la que los visitantes se pueden acercar a los caimanes.